lunes, 6 de septiembre de 2010

Introducción al Acuarismo Empirico, Segunda Parte.


Hola de nuevo!

Como recordarán de la entrada anterior, mencioné que había dos razones principales para la creación de este espacio. En aquella entrada les conté que la primer motivación, era descubrir por qué algunos acuarios con poco mantenimiento tenían mejores resultados que los mios, a pesar de prodigarles tantos cuidados de como soy capaz.

La segunda razón, también tiene una historia por detrás...

Para mi último acuario, decepcionado por los fracasos anteriores, decidí hacer algo extremadamente "sencillo", aún trabajando con mi pecera de 120cms y un equipamiento simple, compuesto por el indispensable filtro de placas, un aireador y un recientemente adquirido filtro de cascada de 600lts/h. ¿Habitantes? También algo en extremo sencillo: Dos Carassius.
Por supuesto, sencillo es solo una expresión (De lo contrario no estaría escribiendo esto en este momento), ya que a las pocas semanas, uno de los dos animales falleció tras un repentino ataque de hongos. ¡Y no piensen que no supe tratar a los peces! Este ataque de hongos se manifestó de forma prácticamente instantánea y letal: Al irme a trabajar, los peces estaban en perfecto estado. Horas después, al regresar a casa, uno de ellos ya había fallecido, y el otro se hallaba severamente afectado.
Tras tratarlo a toda velocidad, el pez se recuperó y siguió su vida sin inconvenientes y, poco después, viendo que ya no tenía problemas y la pecera parecía marchar perfectamente, volví a añadir un compañero.

Ejemplo de Goldfish con problemas
en su vejiga natatoria. En el caso del
mio, en particular, no flotaba panza
arriba, si no verticalmente.
No pregunten qué salió mal. Ese es el motivo de este blag, después de todo.

El pequeño sobreviviente falleció a los pocos meses, sin razón aparente. Al tiempo, el otro pez desarolló cierta malformación o problema de flotabilidad, que le impedía mantenerse derecho en el agua, por lo que pasaba la mayor parte de su tiempo flotando verticalmente. A pesar de mis cuidados, también terminó por fallecer, meses más tarde.

Terriblemente frustrado, vacié mi pecera y la abandoné por casi medio año.


Y sin embargo, mi amor por el acuarismo fué más fuerte y no pude dejar pasar mucho tiempo sin sentir la imperiosa necesidad de empezar un nuevo proyecto. Pero esta vez, tenía que ser algo distinto, algo novedoso, algo completamente diferente. Es así, que decidí comenzar un acuario plantado.
Pero por supuesto que no podía empezarlo sin suficiente información, así que comencé a investigar al respecto...  Y es aquí que la historia devela el segundo motivo de la creación de este espacio:
¡Que inmensa cantidad de información que hay al respecto! Y lo más importante... ¡Que dispar que és!


Una rápida investigación sobre "Acuarios Holandeses", me reveló que no hay manera de hacerlos sin equipos especiales. Como mínimo, se requiere una excelente iluminación, un sistema especial de filtrado, un sistema de inyección de Dióxido de Carbono, varios tipos de fertilizantes y un buen equipo para medir gran cantidad de parámetros del agua.
Sin decepcionarme, continué buscando, inspirado por mi primera motivación: ¿Si mi hermano puede tener elodeas y "pinitos" saludables en su pecera, sin ninguno de estos equipamientos, por qué yo no?
Llegué así, a descubrir la teoría de los acuarios plantados "Medium-Tech" y "Low-Tech": Acuarios que, mediante un adecuado balance entre vida animal y vegetal, permiten obtener resultados similares (O mejores, incluso, dependiendo los deseos del acuarista) a los High-Tech, sin necesidad de invertir un dineral o hacer una carrera de ingeniería en la universidad. Con renovadas esperanzas, comencé a investigar, leer y tomar apuntes: Materiales necesarios, como armar la pecera, como balancearla... Y ¿Adivinen que?

Ecología del Acuario Plantado,
por Diana Walstad.
Como vengo diciendo, la palabra "sencillo" parece no existir en el diccionario de la Real Academia de Acuariofilia. Según mis lecturas preliminares sobre el tema, sólo hay un libro (Ecología de los Acuarios Plantados, por Diana Walstad) que explica como trabajar y armar un acuario plantado exitoso. A partir de allí, es todo "terra incognita".
Por supuesto, antes de salir corriendo a comprar un libro (que, por cierto, no consigo en Argentina), seguí buscando información, para comprobar los resultados de estos acuarios. Resultados reales, comprobados, de ser posible con fotitos e instrucciones "paso a paso"... Y nada. O, para ser justos, nada "a medias": Buscando en internet, obtuve muy buena información, pero siempre había algo incompleto.
Habiendo estudiado Química, mi pensamiento analítico apunta a buscar instrucciones concretas, concisas y reproducibles, que, llevadas a cabo con el rigor necesario, deberían dar resultados similares... Pero de eso, en la internet no había nada que se aplique a mi caso.

En ocasiones, la información no eran más que preguntas respondidas a medias por gente que lucía sus acuarios en foros o páginas personales. En los mejores casos, la información incluía instrucciones paso a paso, pero los materiales utilizados no se pueden conseguir en nuestro país, o las barreras idiomáticas complicaban el entendimiento de las instrucciones (Si, sé inglés y también sé utilizar los traductores online... Pero mucha gente no, y aún así, eso no supera una buena explicación en nuestro idioma natal, ¿no creen?).
Y también, estaba lo peor... Horror para mi necesidad de "formulas repetibles": ¡Cada guía, cada consejo, cada foto era un mundo diferente!

Entonces: ¿Que cosas funcionan y qué cosas no son necesarias? ¿Que hace, en la práctica, un buen acuario plantado? ¿Es posible tener un acuario saludable, sin tener que dedicarle todo nuestro tiempo y dinero? ¿Puede hacerlo una persona común y corriente, o es necesario cursar una carrera terciaria y varios cursos de posgrado?
 
Basandomé en los hechos, la respuesta es SI.
La pregunta del "¡¿Cómo?!"... Acompáñenme, y tratemos de descubrirla juntos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario